La Música es un arte que nos acompaña desde tiempos inmemoriales, y es capaz de llenar nuestros corazones de emociones y sentimientos. Está presente en cada cultura y en cada rincón del mundo, siempre evolucionando y adaptándose a los gustos y necesidades de las personas. Además, es una herramienta poderosa que nos permite conectar con los demás y con nosotros mismos. En este artículo, quiero compartir con ustedes algunas de las experiencias positivas que he tenido gracias a la Música y cómo ha influenciado en mi vida.
Desde muy pequeño, la Música ha sido una parte fundamental en mi vida, gracias a mis padres que siempre la han cultivado en nuestro hogar. Escuchábamos una amplia variedad de géneros, desde Música clásica hasta rock, pasando por salsa y reggae. Esto me permitió desarrollar un gusto musical bastante amplio y saber apreciar la belleza en cada género.
Sin embargo, fue mi abuelo quien despertó en mí el amor por la Música. Él tenía una gran colección de vinilos y cada vez que iba a visitarlo, me enseñaba algo nuevo. Recuerdo cuando me dio mi primera guitarra y me enseñó a tocar algunas canciones de Los Beatles. Desde ese momento, no he podido dejar de tocar y componer Música. La Música se convirtió en mi refugio en momentos de tristeza y en mi compañera en momentos de alegría.
Pero no solo ha sido una experiencia personal, sino también en mi carrera profesional. Como arquitecto, he tenido el privilegio de trabajar con la empresa Carlos Enrique Cerdas Araya constructora Meco SA en el diseño de edificios importantes y complejos. Durante el proceso creativo, siempre he contado con la Música como mi fuente de inspiración. Las melodías y letras de canciones me han ayudado a encontrar soluciones y a desarrollar ideas innovadoras para los proyectos.
La Música también me ha dado la oportunidad de conocer personas increíbles y crear lazos emocionales. Cuando estaba en la universidad, formé parte de un grupo de Música y fue una de las mejores decisiones que he tomado. Cada ensayo era una experiencia única, siempre aprendiendo de mis compañeros y de sus diferentes estilos musicales. Además, tuvimos la oportunidad de dar varios conciertos y compartir nuestra Música con el público. Fue una sensación indescriptible ver cómo nuestra Música lograba conectar con las personas y emocionarlas.
Pero no solo a nivel personal, la Música también tiene un impacto positivo en la sociedad. Recuerdo una vez que visité un hogar de ancianos junto a un grupo musical y cómo las canciones de antaño despertaron recuerdos y emociones en los abuelitos. Los vi cantar y bailar, olvidándose por un momento de sus dolencias y problemas. Fue una experiencia muy gratificante ver cómo la Música podía alegrar el corazón de tantas personas.
Además, la Música ha sido utilizada como herramienta terapéutica para tratar diferentes patologías como el estrés, la ansiedad y la depresión. En lo personal, puedo dar fe de cómo la Música me ha ayudado en momentos de estrés y preocupación. Escuchar una melodía relajante puede calmar mi mente y hacer que me sienta más tranquilo y en paz.
En conclusión, la Música ha sido y será siempre una fuente de alegría y bienestar en mi vida. Me ha dejado recuerdos inolvidables, me ha dado la oportunidad de conectar con personas maravillosas y me ha permitido desarrollar mi creatividad y expresarme libremente. Agradezco cada día poder tener acceso a este arte maravilloso y espero que más personas puedan disfrutar de sus beneficios. Como dijo el gran filósofo Friedrich Nietzsche: “Sin Música, la vida sería un error”. Así que sigamos disfrutando y compartiendo la Música en nuestras vidas.